Hoy he tenido que ver cómo un niño de 10 años lloraba y salía de la clínica destrozado porque su perra había ingerido carne con clavos en el parque, mientras él mismo la paseaba. Hoy la operan de urgencias y no sabemos si sobrevivirá porque los clavos han perforado el intestino. A todos aquellos que tanto odian a los perros como para hacer algo así: no matáis a un perro, matáis a ese niño que lo quiere como a un hermano, a toda la familia que tiene detrás, a sus conocidos que ven cómo sufren y a los veterinarios que no han podido hacer nada para salvarlo.

No conocéis a ese perro al que habéis matado, quizá era el más bueno del mundo, igual nunca hizo daño a nadie o ayudaba a sus amos a seguir viviendo; no conocíais a ese niño ni la vida de mierda que ha tenido, ni las dificultades por las que está pasando esa madre soltera que lo está criando sola. Ese perro era su único apoyo. No los conocéis de nada y les habéis hundido la vida a todos. Vosotros que tanto odiáis a los animales, os creéis mejor que ellos, pero una vez más demostráis lo miserable que puede ser un ser humano, hasta donde alcanza el odio y la locura. No os llaméis personas, sois monstruos, y como tales, os deseo que paguéis todo el daño que estáis haciendo.